En una piscina puedes contraer desde infecciones leves hasta morir.
En algún momento de nuestra vida hemos estado dentro de una piscina, ya sea en un club deportivo, parque acuático, hotel, restaurante o en el mejor de los casos en nuestra propia casa, si lo has hecho sabrás que pocas cosas en la vida se disfrutan tanto como pasar tiempo agradable dentro de una piscina.
Quizá sea por sus refrescantes aguas, por ejercitarse o simplemente por diversión las piscinas son el lugar favorito de muchas y muchos hoy en día.
Pero, así como son de fascinantes estos lugares también podrían ser una fuente de infecciones que van desde las leves a otras que incluso pueden costarle la vida a los usuarios.
¿Qué?
Sí, leíste bien. Una piscina puede ser una fuente de infecciones. Las posibilidades de contraer enfermedades y/o parásitos se incrementan si es una piscina pública o si tienes mascotas en tu casa y si no se lleva a cabo el mantenimiento de manera adecuada.
¿Cómo sucede esto?
Existen varios factores que favorecen la proliferación de patógenos en las piscinas. A continuación te presento las más importantes y que se deberían tener mas cuidado al realizar los mantenimientos.
No quitar las hojas y basura que se encuentra dentro de la piscina
No filtrar el agua el tiempo suficiente para que toda el agua se limpie
No tener en balance químico el agua
Tener menos de 1 parte por millón de cloro libre.
¿Cuál es el riesgo?
En el mejor de los casos contraer infecciones en los ojos, oídos o la piel por contaminación con hongos, esto es lo que sucede de manera mas común. El riesgo medio sería contraer una infección estomacal que provoque fiebre, diarrea y vómitos o alguna infección pulmonar o de las vías urinarias por bacterias o parásitos. El riesgo alto sería la muerte, aunque es un caso extremo y poco común la posibilidad de muerte por nadar en una piscina contaminada es real.
En 2018 un hombre en Estados Unidos falleció por una infección cerebral llamada meningoencefalitis amebiana primaria ocasionada por el ameboide Naegleria fowleri es un parásito de agua dulce y puede encontrarse en lagunas, estanques y piscinas.
Imagen: Naegleria fowleri Fuente: https://www.cdc.gov/parasites/naegleria/index.html
¿Cómo sé si la piscina donde voy a nadar está contaminada?
Por lo menos en México hay una norma oficial obligatoria que todas las piscinas publicas deberían cumplir y dentro de las reglas de la Norma indica que cada piscina deberá tener una bitácora de mantenimiento. Mi recomendación es solicitar a la administración que nos proporcione las bitácoras de mantenimiento y verificar que las mediciones de cloro libre sean de un tiempo no mayor de 4 horas de tu llegada al establecimiento. También se podría solicitar el resultado del análisis de laboratorio del mismo mes.
Quiero que sepas que una piscina con agua transparente no es sinónimo de agua limpia microbiológicamente hablando. Por lo que deberíamos tener mucho cuidado.
imagen: Kit para análisis de agua de piscina.
¿Qué hacer para evitar que la piscina se contamine?
Es muy común que personas sin conocimientos en química y microbiología realicen los trabajos de mantenimiento en las piscinas publicas y privadas, por los bajos precios que ellos manejan y que en la mayoría de las veces esos costos bajos se deben a que compran productos baratos pero de mala calidad, porque usan productos que están prohibidos para el uso en piscinas (ni aun ellos saben que son prohibidos) o por el poco tiempo que le invierten al mantenimiento de cada piscina. ¿Entonces, que debo hacer?
Asesorarte bien en el tema del tratamiento del agua de las piscinas.
Lo ideal sería que tú hicieras el mantenimiento, así sabrás qué productos y cantidades aplicar para la correcta desinfección
En caso de que no tuvieras tiempo para hacer el mantenimiento por cuenta propia, acércate a una empresa que sea profesional en piscinas para que ellos te brinden el servicio de mantenimiento.
Solicita que la persona o empresa que hace el mantenimiento lleve una bitácora donde incluya qué productos y cantidades usó, la medición de los parámetros básicos de la piscina y la frecuencia de los retro lavados de los filtros.
Invertir en una piscina limpia y desinfectada es invertir en tu salud.
IBQ. Zurisadai Castañeda Mendoza
Gerente Alwater
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